Una parte de esta ciudad tenía por nombre Hanan Cusco, y la otra Hurin Cusco, lugares donde vivían los más nobles de ella y donde había linajes antiguos. Por otra estaba el cerro de Carmenqa, de donde salen a trecho ciertos torrecillas pequeñas, que servían para tener cuenta con el movimiento del sol, de que ellos mucho se preciaron (la letra cursiva en nuestra ) no tuvieron los indios y sus reyes menor cuidado en la división del año, y ordenar las fiestas que en él se habían de hacer a sus tiempos y ocasiones, midiendo las diferencias y mudanzas del año que en las demás cosas que para la policía y gobierno y regimiento desde reino establecieron porque, según veremos ahora, no les llevaron ventaja los antiguos egipcios, ni los astrónomos más sabios, que ordenaron el año, partiéndole en doce lunas o meses, y los más días que sobraban, consumían con las mismas lunas, y cada luna o meses tenían puesto su mojón o pilar alrededor del Cusco.
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